El Madrid ha vuelto a la carga. Cesc es un jugador que interesa y mucho en la casa blanca. Según he podido leer en el diario Marca, los dirigentes madridista invitaron a su representante al partido contra el Bayern para tener posteriormente una pequeña reunión.
El Madrid se está planteando lo que le supondría el fichaje del catalán, e incluso ha valorado la posibilidad de incluir a Robinho en la operación. Wenger es un enamorado del juego del brasileño, y podría aceptar un trato así, a pesar de lo importancia de Cesc en el Arsenal.
Si Robinho no entrase finalmente en la operación, esta podría suponerle al Madrid un desembolso cercano a los cuarenta millones de euros. En el club de Concha Espina no se ve mal esta inversión, pues un jugador joven, con gran proyección, y que está dando un gran rendimiento en un club grande como es el inglés.
Cesc está muy agradecido por el interés blanco, y no dudaría en fichar por el Madrid, siempre y cuando el traspaso se realizara con el visto bueno del Arsenal. El mediocentro se encuentra muy agusto en Londres, y no quiere ser un problema.
Cesc es una de las tres promesas electorales de Calderón, y el presidente tiene muy claro que tiene que ser una de las incorporaciones del próximo año. Alguien muy cercano al presidente se ha encargado de hacerle llegar este interés, incluso cuando el Madrid se hizo con los servicios del argentino Gago, ya que no los consideran incompatibles.